El entrenador del Recreativo de Huelva, Ángel López, tras saludar con un "buenos días, buenas tardes", dio "muchas gracias" dos veces por la enhorabuena y declaró sobre el partido de Córdoba que "en el fútbol siempre se sufre, siempre se sufre. Aunque hubiésemos hecho el 0-2 yo estaría igualmente sufriendo, seguro, sí es cierto que ha habido ocasiones en la segunda y en la primera también como para haber llegado algo más tranquilos pero, ya digo, para mí, mi forma de vivirlo hubiera sido parecida con 0-1, con 0-2 o con 0-3. No habríamos bajado la guardia ni un solo segundo porque esto es competir y el Recre compite". 
 
Buena parte de la comparecencia se centró en su expulsión, sobre la que dijo que "yo en la jugada polémica el balón sale de la banda, me viene directamente a mí, no hago ninguna intención e inmediatamente voy con el balón a dárselo a mi lateral izquierdo, que es el que saca. Entonces es lo único que he hecho, a partir de ahí me he quedado en la esquina, no he intervenido en absolutamente nada, y no he tenido ningún rifirrafe con absolutamente nadie del Córdoba, con absolutamente nadie, he dado el balón a mi lateral izquierdo y a partir de ahí estamos todos en una situación bajo presión, todos nos jugamos mucho, es entendible, creo que es entendible, nos estamos jugando mucho, mucho, nos estamos jugando mucha historia de este club, nos estamos jugando... no sé cuánta gente ha venido hoy, me parecía que estaba el estadio lleno, que han venido y han madrugado, y han venido hasta aquí, y no han parado de alentar, y yo estoy defendiendo a ellos también porque se lo merecen, más que nadie". 
 
El técnico explicó que "el árbitro no me ha dicho nada, ha sido el línea. El árbitro ha visto perfecamente que yo no he hecho absolutamente nada, me he quedado el balón, no he perdido tiempo, le he entregado el balón al lateral izquierdo y a partir de ahí los que se han puesto nerviosos, los que se han salido fuera de sí, los que se han descontrolado, han sido los jugadores del Córdoba, no yo, yo estaba tranquilo y al final el expulsado soy yo. No pasa nada, no pasa nada, la labor del árbitro es muy difícil, muy difícil. Él también se juega mucho. Él también se juega mucho. Es un árbitro que debuta en la categoría, que querrá hacer las cosas bien y que querrá tirar para adelante. Yo he sido el sacrificado pero no pasa nada, porque aquí no pasa nada, porque aquí lo importante es la afición y los jugadores, la afición y los jugadores. Yo estoy de la raya para afuera. Lo importante son los que están de la raya para adentro, que son los jugadores, y que yo no esté la semana que viene no pasa nada, no pasa nada. Les alentaré, les meteré como les tengo que meter y saldrán como tienen que salir, y no son un grupo de futbolistas dependientes de su entrenador, porque están sacando el carisma, el carácter, la personalidad, la creatividad, el atrevimiento, el ser espontáneos, y estoy seguro que la semana que viene lo van a sacar". 
 
"Bueno, las cuentas son esas pero el que quiera lanzar las campanas al vuelo, como vengo diciendo, que mire la clasificación. Es real, no estamos en la jornada 2, estamos en la jornada 14 y las cuentas deben ser las de la jornada 14, no seré yo el que haga mi propia clasificación en función de... jornada 14, jornada 14, objetivo: Marbella", continuó.