La jugadora de bádminton onubense Carolina Marín se ha mostrado hoy "superfeliz y orgullosa" de haber sido galardonada por la Junta de Andalucía con "el mayor premio que le pueden dar a un andaluz", la medalla de Andalucía. 
 
En declaraciones a Efe, esta joven de 24 años ha expresado su satisfacción por "poder recoger" la medalla y por el hecho de que "mi tierra haya decidido reconocer mi trayectoria y los éxitos que he tenido a lo largo de mi carrera". 
 
 
Pese a haber recibido numerosas distinciones, entre ellas el Premio Nacional del Deporte a la mejor deportista y la Medalla de Bronce de la Real Orden del Mérito Deportivo, reconoce que la concesión de la Medalla de Andalucía es "especial y todo un orgullo". 
 
Por último, se ha mostrado convencida de que con este reconocimiento se contribuirá también, en Andalucía, a "seguir promocionando un deporte como el bádminton, mi deporte, y generar en la sociedad, sobre todo en los más pequeños, la incertidumbre por conocer y practicarlo". 
 
Nacida en Huelva el 15 de junio de 1993, Carolina Marín es la imagen del bádminton en España por su presencia permanente en la elite de este deporte que, hasta su irrupción, era un coto cerrado dominado tradicionalmente por las asiáticas. 
 
En su larga lista de torneos adjudicados, cuenta, entre otros, con tres títulos de campeona de Europa, dos del Mundo y su medalla olímpica en Río de Janeiro en 2016.